a veces llega sin buscarla
me despierta susurrándome
y se agarra a mí
para entrar en calor
yo la acojo
como si estuviera desamparada
como si no tuviera adonde ir
como si yo fuera su único refugio
pero es ella
la que me elige
la que se compadece de mí
y me ampara
y me acoge en su seno
y me da la vida
la suficiente vida
para aguantar un día más
unas horas
unos minutos
que más da
yo nunca he sabido medir el tiempo
y ahora menos
me despierta susurrándome
y se agarra a mí
para entrar en calor
yo la acojo
como si estuviera desamparada
como si no tuviera adonde ir
como si yo fuera su único refugio
pero es ella
la que me elige
la que se compadece de mí
y me ampara
y me acoge en su seno
y me da la vida
la suficiente vida
para aguantar un día más
unas horas
unos minutos
que más da
yo nunca he sabido medir el tiempo
y ahora menos
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