me retuerzo la perilla
con las mismas ganas
que retorcería el cuello
de muchos cerdos de dos patas
y dos manos impregnadas
de sudor ajeno
y de sangre ajena
me retuerzo la perilla
hasta provocarme dolor
hasta escuchar el mismo grito sordo
y ahogado
que espero escuchar alguna vez
de toda esta piara de chanchos pestilentes
con las mismas ganas
que retorcería el cuello
de muchos cerdos de dos patas
y dos manos impregnadas
de sudor ajeno
y de sangre ajena
me retuerzo la perilla
hasta provocarme dolor
hasta escuchar el mismo grito sordo
y ahogado
que espero escuchar alguna vez
de toda esta piara de chanchos pestilentes
No hay comentarios:
Publicar un comentario