vendedor de poemas

vendo poemas sin firmar
vendo poemas sin autor
vendo auténticos poemas sin dueño
vendo poemas para enamorar
poemas para abandonar
poemas para olvidar
poemas nuevos y viejos
poemas largos y cortos
difíciles y fáciles
brutos y cursis
groseros y sutiles

vendo vendo poemas
vendo poemas solo por la voluntad
vendo poemas por lo que  me quieran dar
vendo poemas porque necesito comer de ellos
porque necesito pagar mi hipoteca
porque necesito educar a mis hijos
en los mejores colegios de pago
vendo poemas porque nunca les cogí cariño
como nunca cogí cariño a nada ni a nadie
vendo poemas porque no me importan
porque nada ni nadie me importa
ni siquiera yo me importo
vendo poemas porque algo tengo que vender
de algo tengo que vivir
y es solo esto lo que sé hacer
escribir poemas
que no me atrevo a firmar
que me niego a darles mi autoría
y mi apellido
que me avergüenzo de ellos
desde el momento en que los pienso
vendo mis poemas porque no los quiero a mi lado
porque son unos absolutos y repugnantes mierdas
que me dan asco
y me ensucian las manos
vendo poemas porque estoy mejor sin ellos
porque me dan miedo
porque me doy miedo
porque confío que así no vengan más a mi cabeza sin llamarlos
sin invitarlos
sin desearlos
vendo poemas porque ya no aguanto más su porquería
su basura
su indiscreción
su enferma sinceridad
sus aberrantes verdades
sus ocultas mentiras

vendo poemas porque cualquier día me ven matándolos
o matándome
porque o ellos o yo
porque soy una persona decente que no puede pensar
ni escribir estas cosas tan detestables
tan degeneradas

vendo poemas porque yo no elegí la poesía
ella me eligió a mí
sin tener en cuenta mi opinión
ni mis ideas
ni mis aspiraciones
ni mis creencias
vendo poemas porque estoy cansado de su dolor
de sus noches de insomnio
de su descaro
vendo poemas porque van a acabar con todas mis amistades
y hasta con mi matrimonio
porque todos me dicen que nos los aguantan
ni me aguantan
vendo poemas para que ustedes
mi público
mi querido y fiel público
los maten y rematen de una vez

vendo poemas porque aborrezco vivir de ellos
y porque no quiero comerciar con mi alma
ni con mi pena
con nuestra pena

( ¿está mejor así?)