por una banca pública gestionada por los ciudadanos

odio profundamente a los bancos
y a  sus banqueros
el robo institucionalizado
y legalizado
por injustas leyes
hechas por ellos
y para ellos
y contra todo lo demás
y todos los demás

odio profundamente su crueldad
su avaricia
su inhumanidad
su terrible maldad
sus ojos
y sus dientes de hiena
sus detestables corbatas
y sus horribles trajes de ladrones oficiales

odio la muerte
las costumbres que nos atrapan
y no nos dejan ser lo que sentimos
las convenciones
la educación
la culpa
los miedos que no nos dejan ser libres
la falsa libertad domesticada
las palabras vacías
que quedan fantásticas
pero que  no se atienen a ninguna verdad
a ningún verdadero sentimiento
las imposiciones racionales
sobre la locura creativa
el control
las promesas imposibles
que no queremos incumplir
y nos atrapan
para siempre en la mentira
en la mentira más cruel
en la mentira más indigna
en la mentira
más mentira
de todas mentiras
que podemos hacernos
y prometernos